Cannes 2006

Hace horitas nomás se entregaron los premios del festival de Cannes de este año. La selección oficial de largometrajes estuvo compuesta por 20 films de los cuales uno salió de nuestra parrilla. Se trata de Crónica de una fuga, peli dirigida por el uruguayo Adrián Caetano (Un oso rojo, Tumberos) y protagonizada por Montecristo, Rodrigo de la Serna (el amiguito del Che), Nazareno Casero (el hijo del gordo) y Diego Alonso (el esterotipado perodista villero de La liga o uno de los drogones de Okupas).

Era cantado que nuestra peli no se iba a llevar un carajo, sobretodo porque había entrado de ojete algunos días despues de que se dio la selección oficial. Se comenta que se bajó alguna otra peli o que hubo algún otro lío. La cuestión es que para los muchachos del film, estar adentro ya era una gloria, estrategia sentimental que les debió ayudar a contenerse cuando se anunció que la inglesa The wind that shakes the barley se quedaba con la Palma de Oro del 2006.

Echarri facho

Hoy tuve la suerte de poder ver Crónica de una fuga en uno de los pocos horarios que conserva en la evidentemente despareja pelea con El código Da Vinci, la de mucho ruido y pocas nueces. Nuestra peli es varias veces mejor que la del librito de Dan Brown y de eso no cabe duda. Por esta vez me voy a poner la camiseta y decir que la pelicula de Montecristo entra en el podio anual de este 2006. No voy a tipear una extensa crítica, hay miles de tipos más capacitados que yo, sólo quiero decir que es admirable la capacidad que tiene el film de atarte a la silla con métodos que nada tienen que ver con lo macabro ni con el "susto fácil". El climax final, relacionado directamente con el titulo de la peli, está increiblemente bien sostenido en una duración que no suele ser habitual, y hasta los ultimos minutitos te duran esas ganitas de echarte un cago. Quizas me siento tan maravillado porque durante las dos horas de peli no pude parar de pensar que todo eso pasó realmente a cuadras de donde estoy escribiendo ahora. Trataba de ubicar alguna casa o reconocer alguna calle, y eso no es algo que me suela pasar cuando voy al cine. Si me siento extraño cuando en alguna peli nacional reconozco algun lugar de capital, imagínense como me puse con el hecho de que toda la peli transcurre en el mismo lugar donde Mascos goleó y gustó en uno de los dos partidos que disputó en esos pagos.

En fin, uno empieza hablando de Cannes y termina con Mascos. Para cerrar es menester decir que la celeste y blanca no se fue con las manos vacías del festival, ya que Pablo Agüero se anotó con el Premio del jurado del Cortometraje (una especie de segundo puesto), por Primera nieve.

De última, eso que me pasa es un Mundial.